Diciembre siempre es un mes difícil, pero también es una época donde se asumen nuevos retos para el año entrante. Tal vez una carrera suena a mucho, pero ningún objetivo es imposible. Conozca algunos tips para empezar bien el año, en preparación para los 10K.
1.- Tener un plan
Primero lo primero. Cuando una persona se pone metas, es mucho más fácil trabajar para alcanzarla. El plan debe tener una fecha realista. ¿Y por qué realista? Porque se trata de una carrera de resistencia, no una de velocidad. Una vez que tenga una fecha, un plan y un camino a recorrer, se comprometerá con ese objetivo tan deseado. El tiempo aconsejado de entrenamiento para los 10K es de 10 – 12 semanas. Lo importante es cumplir cada paso dentro de ese plan.
2.- Ser progresivo y metodológico
Correr 10K no se logra del día a la mañana. Nuevamente aquí entra el compromiso con la meta. Es muy importante empezar de menos a más, de esa forma el objetivo se podrá cumplir. No sobrecargar el cuerpo, no intentar hacer todo en un día. Cada persona se debe programar porque – como dijimos antes – no se trata de quien llegue primero, sino de llegar.
3.- Permitir que tu cuerpo se adapte.
El cuerpo se acostumbra, los hábitos de van construyendo. En este caso, no se trata solo de correr, se trata de dejar que el cuerpo atraviese un proceso de adaptación. Hay que ayudar a los músculos que están siendo trabajando. Por eso un plan de entrenamiento tiene que tener un trabajo específico y de fortalecimiento. Cardio, sí. Pero también trabajar en la musculatura. Es un camino a recorrer, el cuerpo también necesita su tiempo para estar listo para una carrera.
4.- Respetar el tiempo de descanso
No significa dejar de entrenar, pero sí enfatizar en el estiramiento y la elongación. Si seis días a la semana entrena, entonces el cuerpo se merece un tiempo para recuperarse. Se debe relajar los músculos que – por la actividad física – están constantemente tensionados de tanto trabajo.
Por otro lado, dormir bien también es importante. No tanto por las horas pero sí la calidad. Deje que su cuerpo descanse y de esa manera responderá mejor en el próximo entrenamiento.
5.- La alimentación es clave
Muchos se confunden y creen que la nutrición durante el entrenamiento es solo para controlar el peso. Pero no es solo eso. Fortalece los músculos y recupera el cuerpo para el siguiente día. Si sus entrenamientos duran más de una hora, necesita una fuente de carbohidratos en las comidas cercanas al ejercicio. Esto no debe faltar. Pero en general, la alimentación siempre debe ser balanceadas y en sus platos predominar la proteína y los vegetales.
6.- Una hidratación constante
Si el cuerpo no está bien hidratado, no tendrá el mejor desempeño. Por eso es importante tomar agua alrededor del tiempo de ejercicio y durante todo el día. Una recomendación: tomar agua con limón, con jengibre o con bicarbonato de sodio ayuda mucho a la recuperación tras el ejercicio, ya que hace que el cuerpo tolere mejor los cambios de energía y esfuerzo del plan de entrenamiento.
¡Lo importante es empezar! Comprometerse con un objetivo, en este caso los 10K. Y saber que muchas veces hay que empezar de cero. No desanimarse si hay un obstáculo. Tampoco desesperarse por llegar primero a la meta, más bien respetar el cuerpo y sus tiempos, escucharlo. No es tan difícil como parece. ¡A empezar de la mejor manera este 2019!