Extienda la vida útil de este implemento esencial del
cuidado oral, con estos sencillos tips de mantenimiento.
Libre de bacterias
La temperatura del baño lo hace un lugar propicio para la proliferación bacteriana y estos microorganismos pueden llegar hasta su cepillo de dientes y, por ende, a su boca. Por ello, deje que se seque al aire y si le es posible, consérvelo cubriéndolo con una tapa especial. Retírela solo cuando lo vaya a usar.
Enjuague previo
Para garantizar que las bacterias no lleguen a su boca al usar el cepillo, coloque un poco de enjuague bucal en una taza pequeña y sumerja las cerdas por cinco minutos, aproximadamente. De esta manera, estará limpiándolo eficientemente antes de usarlo y realizará su cuidado oral de la mejor forma.
Cómo guardarlo
Es aconsejable que lo conserve en el contenedor especial para cepillo de dientes del baño y que deje que se seque al aire antes de colocar la tapa protectora. Luego de usarlo, asegúrese de enjuagarlo meticulosamente. Si comparte el baño con otros miembros de la familia, el cepillo no debe estar en contacto con otros.
Dónde colocarlos
Si ubica el contendor de cepillos muy cerca del lavabo, puede salpicarlos con agua sucia al lavar sus manos, por lo que es recomendable que coloque este ítem lo más alejado dentro de este espacio, pero a una distancia de fácil acceso. El contenedor también puede ensuciarse y debe tenerlo en cuenta al limpiar el baño.