La diabetes es una enfermedad crónica que se presenta cuando el cuerpo no puede regular adecuadamente los niveles de glucosa en la sangre. Esto puede deberse a una deficiencia en la producción de insulina (Diabetes Tipo 1), a una resistencia a la insulina (Diabetes Tipo 2), o a otros factores, como el uso de algunos medicamentos.
Tiene dificultades para convertir la glucosa de los alimentos en energía, lo que resulta en niveles elevados de azúcar en la sangre. Esto puede llevar a complicaciones graves si no se maneja adecuadamente.
Estos síntomas, junto con los exámenes médicos adecuados, determinan el diagnóstico de diabetes:
La diabetes, al ser una enfermedad metabólica, puede afectar diversas partes del cuerpo y funciones del organismo. Su médico le informará con mayor precisión los riesgos asociados a su condición. A continuación, se mencionan algunos de manera general:
Complicaciones digestivas
Retraso en el vaciado del estómago, causando problemas digestivos y mayor incidencia de síntomas digestivos como estreñimiento, gases y diarrea.
Complicaciones psicológicas
Mayor riesgo de depresión y ansiedad, y dificultad para manejar el estrés debido al manejo constante de la condición.
Complicaciones inmunológicas
Mayor susceptibilidad a infecciones debido a una respuesta inmune debilitada.
Daño a los riñones, que puede progresar a insuficiencia renal.
Complicaciones cardiovasculares
Mayor riesgo de ataques cardíacos, derrames cerebrales y reducción del flujo sanguíneo a las extremidades, lo que puede llevar a infecciones o amputaciones.
Daño en los nervios que provoca dolor, entumecimiento y debilidad en manos y pies, o afección a los nervios que controlan funciones corporales internas como la digestión, función urinaria y la regulación de la presión arterial.
Daño a los vasos sanguíneos que puede resultar en ceguera, aumento de la presión arterial ocular, que puede dañar el nervio óptico y mayor riesgo de aparición temprana de cataratas.
Mayor riesgo de infecciones bacterianas y fúngicas, heridas crónicas, especialmente en los pies que cicatrizan lentamente y pueden llevar a graves infecciones que resultan en amputaciones.