Ana Patricia Muñoz lidera Grupo Faro. Comparte su visión para construir una democracia más participativa.
El llamado de su país motivó el regreso de Ana Patricia Muñoz a su natal Ecuador. Tras 14 años de vivir en los Estados Unidos preparándose académicamente y ejerciendo el cargo de Vicepresidenta Asociada en la Reserva Federal de ese país. Trabajó en el campo de la Investigación y Comunicación.
Nunca ha parado. Desde que era estudiante de Economía, Ana Patricia permaneció trabajando e investigando para su tesis. Dos días después de defender su trabajo de grado, viajó a hacer su especialización en Desarrollo Local y posteriormente a un máster. “Siempre he estado agradecida por lo que cada oportunidad me ha traído. He tratado de aprovecharlas al máximo, pero más allá de eso, me he planteado desde dónde puedo aportar más”.
Esa es la pregunta que se hizo al asumir el cargo de Directora Ejecutiva de Grupo Faro, organización de la sociedad civil. La respuesta estaba clara: el Ecuador tiene muchas causas y necesidades por las cuales trabajar. La inequidad es uno de los temas que más le preocupa. En su paso por la Reserva Federal de los Estados Unidos, hizo propuestas para investigar las brechas económicas por asuntos raciales, identificó las causas e incidió en la política pública.
Cuando le preguntamos sobre qué es la democracia, Ana Patricia se refiere sobre la importancia de verse reflejado en un sistema que nos compete y nos involucra todos los días, un sistema que determina nuestros derechos, límites y ámbitos de participación. Es la voz del pueblo, la palabra del pueblo.
Da pausa a su voz entusiasta para hacer una reflexión sobre la importancia de fortalecer la democracia. “Definitivamente, este sistema solo es efectivo con la participación de la gente e igualdad de oportunidades. Es un sistema que está en construcción, justamente porque debe romper esas barreras. No importa donde nazcas, en qué ciudad o barrio estés, como ecuatoriano debes tener la oportunidad de potenciar tus capacidades y talentos. Solo así podremos hablar de una democracia lista y plena”.
A pesar de estos desafíos, Ana Patricia destaca que hay esperanza. “Si hacemos un estudio del pasado, vemos que han existido cambios significativos en nuestras democracias, en relación a derechos a la educación, voto para las mujeres, sistema de seguridad social y otras conquistas, que pueden ser perfeccionadas con el tiempo”.
Los programas que Grupo Faro lleva adelante se relacionan, justamente, con la democracia y participación ciudadana, transparencia y gobierno, evaluación y seguimiento, entre otros. De esa forma, como un centro de investigación independiente y apolítico, esta organización aporta con proyectos viables al país. En esa construcción, hay que tener en cuenta a la ciudadanía, academia, empresa privada y Estado; y la importancia de trabajar la política pública en conjunto. También es trascendental medir y analizar la realidad, sin pasiones y con argumentos. Ana Patricia dice que en su casa también aplica la democracia: con sus hijos habla de respetar la opinión del otro, motiva el análisis y el diálogo.
Ser ejemplar es la consigna de un líder. Ser transparente y ético en su forma de vida