Nuestro vecino del sur es un universo por descubrir. Le presentamos lo que no debe perderse al visitar el país Inca.  

Conocido por su gastronomía apetecida alrededor del mundo, ciudades coloniales, montañas espectaculares, desiertos kilométricos y atracciones turísticas únicas, el Perú se roba el corazón de quien lo visita. Gracias a su proximidad geográfica, una escapada rápida es relativamente sencilla desde el Ecuador. Si tiene en mente realizar un paseo a este país, estos son los siete imprescindibles que debe conocer:

Lima. Es una de las grandes capitales de Sudamérica. Clásica y contemporánea a la vez, esta ciudad de contrastes destaca por su encanto colonial y su vibrante vida nocturna. De una vuelta en la Plaza de Armas, visite el moderno sector de Miraflores, realice un vuelo en parapente y disfrute de lo mejor de la cocina peruana en los cientos de restaurantes limeños, amigables con cualquier tipo de presupuesto.

Cusco. La antigua capital del imperio Inca es considerada Patrimonio de la Humanidad. Una ciudad colonial que sirve como el punto de partida hacia Machu Picchu, pero que también tiene mucho que ofrecer a sus visitantes. Camine por sus adoquinadas calles, ingrese a la Catedral de la Compañía de Jesús, ubicada en la Plaza Principal, pasee por los múltiples mercados artesanales y sáquese una foto con las llamas que caminan por el centro.

Machu Picchu. Si es que hay un imperdible en el Perú, este es Machu Picchu. La ciudad perdida de los Incas y una de las siete maravillas modernas del mundo. Turistas de todos los rincones del planeta viajan cada año para poder apreciar estas ruinas, escondidas de los conquistadores y recién descubiertas en 1911. Recorra las ruinas arqueológicas, aprecie la vegetación y no olvide sacarse una foto con la montaña Putucusi de fondo, una de las imágenes más representativas del país. 

Nazca. ¿Quién dibujó las enigmáticas líneas de Nazca? Al igual que las pirámides de Egipto, el complejo de Teotihuacán o las piedras de Stonehenge, su existencia es uno de los misterios más persistentes de la era moderna. Apreciar estos jeroglíficos perfectamente trazados, algunos de más de 300 metros de longitud, es posible desde miradores ubicados en cerros cercanos.

La montaña de siete colores. Si quiere una foto perfectamente instagrameable, que le ganará cientos de seguidores en las redes sociales, este es el lugar que estaba buscando. Llegar a esta montaña, ubicada a más de 5 000 metros de altura, es una actividad físicamente demandante, pero el resultado vale la pena. Puede hacer un paseo de día desde el Cusco. 

Lago Titicaca. Conocido como el lago navegable más alto del mundo, este cuerpo de agua es compartido por Perú y Bolivia. Su historia es fascinante y sus aguas son tan cristalinas que llegan a confundirse con el cielo.

Oasis de Huacachina. Si quiere conocer el desierto costero de este país, no hay mejor lugar que el Oasis de Huacachina. Puede tomar un tour por la arena en buggy, hacer sandboarding y sacar deslumbrantes fotos del oasis, con el agua verde, las palmeras y el contraste del desierto.