Establezca metas posibles, específicas, no difusas. Soñar es importante pero es mejor tener los pies bien puestos en la tierra para avanzar.

Fijarse metas es extremadamente importante en la vida porque permite trazar el camino para conseguir lo que se anhela. Prácticamente se puede decir que una persona puede ser más exitosa si sabe fijarse objetivos.

Si sabe qué camino tomar, es perfectamente posible que llegue al destino. Pero si no se tiene un rumbo fijo, la caminata puede llevarlo a cualquier lugar.
Para conseguir el propósito que persigue es básico saber que existen objetivos a corto, mediano y largo plazo. Esto le ayudará a discernir significativamente las actividades que debe seguir para conquistar esos objetivos.

Priorizar

Si bien puede parecer redundante o aburrido, muchas veces se está ante situaciones en las que realmente no sabe qué quiere, y el papel en esos casos, facilita las cosas.
Si toma papel y lápiz, y empieza a pensar en cuáles son sus objetivos a corto plazo (es decir, a cumplir en los próximos días, o quizás pocos meses), puede darse cuenta que quizás, tenga en mente aquello que realmente no desea hacer y está divagando. Eso lo distrae de hacer lo que realmente es importante y por tanto nos aleja del camino al éxito. Escriba en su lista, los primeros diez objetivos más importantes, por prioridad.

A mediano plazo

Los objetivos a mediano plazo son los propósitos que tenga planeados dentro de pocos meses. Se diferencian de los a corto plazo, pues requieren un poco más de trabajo, y quizás a simple vista, parezcan complicados de lograr. Es importante que también liste los diez objetivos más importantes y en qué orden pretende cumplirlos, pues esto le permitirá desarrollar sus actividades cotidianas de acuerdo a su nivel de importancia.

A largo plazo

Pueden tomar largo tiempo y varios años. Generalmente se relacionan con los sueños y aspiraciones finales de la vida. Todo lo que haga a mediano y corto plazo, debe estar encaminado a conseguir los objetivos de largo plazo. Es un poco más complejo obtener una lista, sin embargo se puede soñar con lograr cosas grandiosas.

De grandes a pequeños

Es más cómodo para los seres humanos pensar en realizar múltiples tareas sencillas, que una sola compleja. El cerebro usualmente asocia lo grande y complicado con lo imposible. Mientras que aquellas tareas que se dividen en varias partes, parecen resultar más viables, aunque el resultado sea finalmente el mismo; aquí cabe la famosa frase: Divide y vencerás.
Por ejemplo, si su objetivo es adelgazar diez kilos en dos meses, puede dividir esa meta de mediano plazo, en una de corto plazo, como ir al gimnasio pasando un día para bajar dos kilos semanales.

Revise su lista frecuentemente

A medida que note que va progresando con sus objetivos, de corto, mediano y largo plazo, tome sus listas y revise que todo esté acorde a la situación actual. Si ya cumplió algunos de ellos puede borrarlos, o redefinirlos. Es importante que tome en cuenta que su vida estará llena de cambios y valorar lo que ha logrado, y aquello que ahora quiere lograr, es una herramienta muy poderosa si quiere llegar lejos en la vida.

Siempre visibles

No sirve de nada que realice todos estos pasos, si va a archivar sus listas y a olvidarlas. Péguelas en la puerta de su cuarto o en un lugar visible para que antes de salir las vea. También puede ser en el espejo, y de paso, rafifica su autoconfianza. De esta manera, todo el tiempo recordarás lo que quieres, y le dedicarás un poco de tu tiempo diario.

Metas posibles

• Dentro de sus capacidades y habilidades: El conocer sus puntos fuertes y débiles le ayudará a fijarse metas que pueda cumplir.
• Realistas: Fíjese una meta que pueda cumplir en tiempo y espacio.
• Flexible: Algunas veces las cosas no irán de la manera anticipada y deberá cambiar su meta. Manténgase flexible para que cuando se dé cuenta de que es necesario hacer un cambio, esté listo para hacerlo.
• Medible: Es importante poder medir su progreso y reconocer cuándo se ha logrado la Meta y cuándo no se necesita ir más allá. Si no lo hace el esfuerzo puede estar mal dirigido y desperdiciado.
• Dentro de su control: La consecución de su meta no debe depender exclusivamente de otras personas. Usted puede controlar lo que hace, pero tiene poco o ningún control sobre lo que otros hacen.
• Nunca se rinda: Si en la mitad del camino, se siente perdido, desmotivado y quiere “botar la toalla”, haga exactamente lo contrario. Motívese y siga adelante. Rendirse no es una opción.
• Lento pero seguro: Puede parecer que la situación no es la que debiera ser, o que el progreso es menos acelerado de lo que quisiéramos, pero recuerde que cuando más fuerte es la tormenta, más pronto llega la calma.