Los alimentos autóctonos del Ecuador destacan por su elevado poder nutricional. Son un regalo de la tierra para mejorar nuestras comidas y crear maravillas en la cocina. Dos de ellos son conocidos por su excelente aporte a la salud y diversidad de usos que les puede dar. Se trata de la quinua y el amaranto, pseudocereales de origen andino, diferentes pero complementarios, que concentran gran cantidad de nutrientes y le ofrecen la materia prima perfecta para expandir sus dotes culinarios. Por ello, le presentamos un menú fuera de lo común, ideal para que expanda sus horizontes y ofrezca algo especial a su familia.